Ana Rodríguez. Trabajar con el poder de la mente es la compleja tarea a la que cada día se enfrenta Javier Luxor, uno de los mentalista españoles más reputados a nivel internacional. Su profesión puede resultar sorprendente y misteriosa, aunque afortunadamente el paso del tiempo ha hecho que cada vez se comprenda y aprecie más la capacidad de ciertas personas, como este madrileño, de ‘adivinar’ datos basándose en la observación y en conocer al dedillo cómo funciona la mente humana.
Recientemente nombrado Mejor Mentalista Iberoamericano, Javier atesora ya una amplia lista de galardones –Nostradamus de Bronce al Mejor Mentalista de Europa 2014-2015, campeón de España de Magia 2013 en Mentalismo, además de dos premios nacionales de Mentalismo, entre otros- que reflejan la acertada decisión que tomó el madrileño allá en el año 1996, cuando optó por centrar su carrera en este particular arte.
Su afición le llevó a ingresar en diferentes sociedades mágicas internacionales, como la International Brotherhood of Magicians (IBM) y la International Magicians Society (IMS), así como en otras nacionales como el Club de Ilusionistas Profesionales (CIP) y el Círculo Madrileño de Prestidigitadores (CIMAPS), además de acudir asiduamente a congresos por todo el mundo.
Por otro lado, Luxor estudió Ingeniería en la Universidad Politécnica de Madrid y en 2001 cursó un Master en Administración y Dirección de Empresas (MBA), unos estudios que le han sido muy útiles a la hora de trabajar en el mundo de la empresa, y es que el mentalista no sólo se dedica a hacer shows, presentaciones y conferencias, también está llevando a cabo una aplicación de sus conocimientos al mundo empresarial. Una propuesta muy interesante e innovadora de la que nos habla, entre otros asuntos, en esta entrevista:
– En primer lugar, me gustaría que me explicara qué es el mentalismo, en qué consiste esta especialidad de la magia que algunos asocian a leer la mente.
– El mentalismo es una rama del ilusionismo que tiene como fin llevar a cabo demostraciones relacionadas con habilidades imposibles que se atribuyen a la mente humana. Es una magia que sucede en tu mente, éste es el motivo principal por el que sea tan impactante para el público, sobre todo adulto.
– Hábleme, a grandes rasgos, de su trabajo, ¿cómo lo vive?
– Actualmente me dedico de forma profesional al mentalismo. Hace ya bastantes años que decidí enfocarme en mi pasión y cambiar un trabajo por una forma de vida. Porque para mí, el mentalismo es una forma de vida. El centrarme en esta actividad me ha permitido desarrollar mi trabajo no sólo en España, sino también en otros países. Además, he podido ampliar mi conocimiento de esta materia y así presentarme a concursos y convenciones a nivel mundial.
– Hemos hablado de mentalismo pero, ¿qué es para usted la magia?
– La magia es todo aquello que te hace sentirte vivo y que te permite creer en lo imposible. Aquello que te recuerda que los sueños pueden realizarse si crees en ellos con suficiente fuerza y pasión. Los magos hacemos un tipo de magia especial, pero no somos los únicos que hacemos magia: el teatro, el circo, el cine, los libros, la música… son capaces de hacernos sentir la magia con su arte.
– Cuando nos preguntan de pequeños qué queremos ser de mayores, nadie dice que mentalista. ¿Cuénteme cómo un niño de Madrid acaba en esta profesión?
– La verdad es que cuando era pequeño tampoco pensaba en ser mentalista ni mago. Eso no significa que la magia no me gustase. Todavía recuerdo estar sentado viendo a los magos que aparecían en el programa de televisión ‘Uno, dos, tres’ y quedarme con los ojos abiertos sin encontrar explicación posible a lo que estaba viendo. Siempre creí en la magia. Con el tiempo me fui aficionando al mentalismo, pero sólo como una afición. Luego me di cuenta de que no se trataba solo de una afición, era algo que me llenaba. Estar en el escenario y compartir con el público era algo que me hacía sentir vivo. Fue en esos momentos cuando decidí que quería dedicarme profesionalmente a esto.
– ¿Cómo se formó? ¿Quiénes fueron sus maestros?
– Yo me he formado, principalmente, entre Estados Unidos y Reino Unido. Tengo grandes maestros como Bob Cassidy y Richard Osterlind… ahora amigos. También he aprendido mucho de forma autodidacta. Es un mundo que se presta mucho a la creatividad y cuando tienes alguna idea de por dónde empezar, la imaginación te permite encontrar muchas ideas para desarrollar tus propias rutinas en el escenario.
– ¿Cómo concibe o diseña sus espectáculos?
– Cuando comienzo a pensar en un nuevo espectáculo me dejo influir por mi situación e intereses actuales. También intento conocer las inquietudes de la gente respecto a la mente humana e intento dar respuesta a esas preguntas con mis juegos de mentalismo. Siempre tiene que existir un punto de humor en todo lo que hago… es que si no, el primero que se aburre soy yo.
– Si tuviera que escoger uno de sus números, ¿con cuál se quedaría?
– Bueno, sin duda la rutina con la que gané el Primer Premio en el último Campeonato Latinoamericano de Magia. Un efecto donde tres personas son capaces de leer la mente de otras tres. Aparte de sorprendente, es un número muy visual, participativo, novedoso y divertido.
– ¿Hay trampa/ truco en esto del mentalismo?
– Nosotros nunca utilizamos esas palabras para definir la técnica o el trabajo que hay detrás de nuestras demostraciones. Esas palabras implican engaño, y nosotros somos ilusionistas. Si me preguntas si detrás de lo que hago hay una explicación racional, te diré que sí que la hay. Ahora, es una explicación al alcance de muy pocos y basada en técnicas de comunicación no verbal, sugestión, hipnosis, psicología, mensajes subliminales, intuición, etc.
– Una anécdota que recuerde con especial cariño.
– Últimamente me acuerdo de una muy divertida donde yo intentaba leer la mente de un espectador y adivinar el nombre de uno de sus amigos de la infancia. Se me ocurrió escribir no sólo el nombre, sino también el apellido. Cuando se lo enseñé, el espectador me dijo de primeras que no conocía a esa persona, pero al rato me dice: “¡Ah… sí. Ahora caigo. Efectivamente, ése era amigo mío cuando yo tenía nueve años y ése era su apellido”. Al principio lo pasé mal porque pensé que había fallado, pero al final fue una situación muy divertida para todos.
– ¿Ante qué personas importantes o destacadas ha actuado? ¿Cómo reaccionaron?
– Pues en todos estos años, para mucha gente. Presidentes, alcaldes, altos directivos, deportistas… pero recuerdo con especial cariño una vez que actué en un evento donde uno de los ponentes era el piloto de Fórmula 1 Marc Gené. El cliente me pidió si podíamos preparar algo especial para él y les dije que sí. Resumiendo, le adiviné la estrategia de carrera para el siguiente fin de semana. Se quedó tan sorprendido que me dijo que hablaría con la escudería Ferrari para contratarme…Por supuesto no lo hicieron, pero pasamos un rato muy agradable.
– ¿Qué le hace a usted diferente de los demás mentalistas?
– Me gusta pensar que soy innovador. Que sigo un camino diferente a la hora de definir el personaje del mentalista. Creo que aporto mi personalidad, mi carácter, mi forma de ser y de ver las cosas. El buscar no sólo entretener, sino motivar con mis presentaciones y demostraciones. Intento no ser un personaje distante u oscuro que habla de temas delicados. Prefiero presentaciones de interés para todos y sin ningún tipo de implicación más allá del espectáculo y la diversión.
– Campeón de España de Mentalismo, quinto en el último Campeonato del Mundo de Magia, Nostradamus de Bronce al Mejor Mentalista Europeo, ahora Mejor Mentalista Iberoamericano… lleva un año muy bueno, me imagino que estará muy contento ¿no?
– La verdad es que sí. Me encanta competir y mostrar mi trabajo en los congresos. Siempre he sido muy competitivo, pero en la competición no sólo busco reconocimiento, busco un motivo para desarrollar mi creatividad y conocimientos en este arte. Es la mejor forma de mantenerse activo y en continuo progreso.
– Hablando de competiciones, ¿qué está preparando para el Campeonato del Mundo de Italia de este año?
– Bueno, la rutina que presentaré ya está preparada. Es la misma con la que gané recientemente el Primer Premio en el Campeonato Latinoamericano. Lo que estoy pendiente de conocer es si finalmente tengo una plaza asignada, porque aunque con los premios que he recibido debería de estar garantizada, desgraciadamente hasta que no está publicado oficialmente puede pasar cualquier cosa.
– ¿Cuáles son sus próximos proyectos? ¿Y sus próximas metas?
– Si todo sale bien, mi próxima meta es participar y conseguir una buena posición en el mundial. Fuera de este asunto, estoy trabajando en varios proyectos relacionados con el mundo de la magia y el mentalismo, pero orientados a la empresa. Estamos diseñando diferentes talleres y cursos para ayudar a las empresas con la formación de su personal: motivación, ventas, etc., utilizando técnicas muy novedosas que mezclan diferentes tipos de habilidades y conocimientos no utilizados hasta ahora en el mundo empresarial.
– ¿Cree que su profesión está mal vista, que se asocia con otras artes oscuras que no corresponden?
– Bueno, sí que existe esa idea en algunas personas, pero yo creo que poco a poco va cambiando. La gente ya se va dando cuenta de qué somos y a qué nos dedicamos y nos separa de la gente que se dedica a esas otras “artes”.
– Me imagino que viaja mucho. Cuando está fuera ¿qué es lo que más echa de menos de España?
– Lo que más echo de menos es a mi mujer y a mi hija. Para mí, la familia ocupa un lugar fundamental en mi vida, por lo que noto especialmente su ausencia, ya que cuando estoy en Madrid paso mucho tiempo con ellas. También echo de menos la comida. Me gusta comer y me gusta probar todo tipo de comida, pero como se come en casa…
– Para terminar, ¿cuál sería para usted una buena noticia?
– Pues sería aquella que alegrara al mayor número de personas en España. Por ejemplo, algo así: ‘El paro en España alcanza el valor más pequeño desde que existen datos oficiales’. Esto sí que es una buena notica, ¿no?