Europa Press. El Diario Oficial de Castilla-La Mancha publica este martes el acuerdo adoptado por el Consejo de Gobierno de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, por el que se declaran Bien de Interés Cultural las líneas de telegrafía óptica de la provincia de Cuenca, con la categoría de Sitio Histórico.
Se trata de torres tipo atalaya, construidas a mediados del siglo XIX que funcionaban con un sistema de espejos. Su uso en España, casi militar, fue muy corto porque al poco tiempo se introdujo en el territorio nacional la telegrafía por cable.
La provincia de Cuenca cuenta con el mayor conjunto de torres de telegrafía óptica del territorio nacional, que formaban parte de la línea Madrid-La Junquera y del ramal de la capital conquense, un patrimonio singular con un valor histórico y paisajístico indudable.
Diferentes términos municipales
Las torres se encuentran en diferentes términos municipales de esta provincia de Cuenca. El despliegue de las líneas viene marcado por 16 torres en diferentes estados de conservación y por los espacios sobre los que se asentaron dos de las cuatro torres desaparecidas.
Con esta declaración no solo se está protegiendo un bien patrimonial, sino también un bien científico y además se fomenta el turismo en la zona, ha informado la Junta en nota de prensa.
En concreto, las torres objeto de protección se encuentran en los términos municipales de Belinchón, Tarancón, Almendros, Saelices, Montalbo, Villares del Saz, Olivares, Valverde del Júcar, Olmedilla de Alarcón, Motilla del Palancar, Iniesta, Graja de Iniesta, Cuenca, Villanueva de los Escuderos, Abia de la Obispalía, Torrejoncillo del Rey, Campos del Paraiso y Uclés.
En Castilla-La Mancha, hasta la fecha, hay un total de 644 Bienes de Interés Cultural (BIC), de los que 92 se encuentran en la provincia de Albacete, 108 en la de Ciudad Real, 99 en la de Cuenca, 104 en la de Guadalajara y 238 en la de Toledo. A estos hay que sumar otros tres lugares que corresponden a la región en general.
Del total de BIC, 499 son monumentos, 50 zonas arqueológicas, 35 conjuntos históricos, 22 construcciones de interés patrimonial, 19 bienes inmateriales, 11 sitios históricos, cuatro elementos de interés patrimonial, un yacimiento arqueológico de interés patrimonial, una colección, una zona paleontológica y un jardín histórico.