Redacción. Con la llegada de 2020 empiezan a llegar las tendencias que marcarán el año, también en lo que a bodas se refiere. Desde las prendas que se llevarán hasta la decoración que destacará en los próximos 12 meses, pasando por las peculiaridades más rompedoras para el día B. El reconocido grupo The Knot Worldwide ha lanzado las tendencias que caracterizarán los enlaces del próximo año.
Tres conceptos fundamentales: microweddings, eco-friendly y solidaria
La personalización, la exclusividad y los detalles cuidados se convierten en el epicentro de la organización. Las bodas con pocos invitados cogerán fuerza a lo largo del 2020, aunque la media actual de invitados en las bodas españolas sea de 130, tal y como se recoge el Libro Imprescindible de las Bodas, publicado por Bodas.net y Carles Torrecilla, en colaboración con ESADE y Google. Estaríamos hablando de microweddings, un tipo de boda en la que los novios prefieren compartir ese momento íntimo y personal con menos gente.
Lejos de tratarse de eventos low-cost, se trataría de celebraciones en las que el gasto por invitado aumentará debido al cuidado máximo por cada detalle. Desde las invitaciones que sorprenden por ser de materiales tan originales como el metacrilato o plexiglás, hasta poner estaciones de champán frente a los baños. Todo cuenta en estos eventos para agasajar a los amigos y familiares más íntimos.
Dentro de este evento tan exclusivo, respetar el medio ambiente será uno de los lemas principales, dando lugar a otra de las tendencia más importantes, las bodas eco-friendly. El reciclaje, las decoraciones con papel reutilizado y el consumo local formarán parte del día B.
Asimismo, la solidaridad también será una de las estrellas del día gran día. Las donaciones a una ONG escogida por los novios o crear una lista de boda online solidaria para que los invitados puedan realizar una donación, cogerá fuerza e irá dejando de lado los regalos de boda más tradicionales como el sobre con dinero.
Personalización, interacción y efecto wow
La personalización y los detalles cuidados también llegan al banquete nupcial. Cada vez queda más lejos el menú tipo y cerrado. Ahora la propia pareja puede diseñar los platos según sus propias preferencias y la de sus invitados. Encontrar la posibilidad de escoger un menú vegetariano o vegano o teniendo en cuenta las alergias de los invitados, será algo habitual y que seguro sabrán agradecer los amigos y familiares.
Las mesas saladas y dulces, las máquinas expendedoras de bebidas o las cintas transportadoras que se pueden ver en algunos restaurantes de sushi también se hacen hueco en las bodas. ¿Qué se busca? Que los invitados se levanten, interactúen y que se conviertan en verdaderos partícipes del día, pudiendo palpar cada detalle y haciendo que se sientan parte del espectáculo. Si antes las bodas se hacían para que las parejas vivieran su día de manera inolvidable, ahora son ellos los que buscan causar el efecto wow entre sus invitados. Para ello, actividades tan sorprendentes como una lectura del tarot, una exhibición de magia o un espectáculo de fuegos artificiales serán casi indispensables.
Pero si hay algo que no cambia, aunque sí que se renueva, es la barra libre. España, según el Informe Global de Bodas 2019 realizado por Bodas.net, The Knot y WeddingWire, encabeza el ranking de los países en los que es tradición servir alcohol en las bodas, llegando al 97%. Un dato que contrasta mucho con otros países como, por ejemplo, la India, en donde solo 2 de cada 10 bodas ofrecen este bebidas espirituosas.
En este aspecto, lo que sí se buscará es dar un aire fresco a lo tradicional. Aunque los cócteles seguirán siendo los reyes y el clásico Gin Tónic no perderá fuerza, la tendencia se inclina por cócteles más elaborados y mezclas a base de bebidas efervescentes, como el agua carbonatada o champán. Un toque de sofisticación para una de las tradiciones que se mantiene año tras año.
Derroche de color y luz
Si una cosa ha quedado clara es que las bodas de 2020 pasan a convertirse en un espectáculo. Y como buena función, las luces y los colores no pueden faltar para crear un cuento de hadas. Guirnaldas, barras de LED suspendidas, velas, decoraciones llamativas con neones, flores y hierbas salvajes XXL, serpentinas y fuegos artificiales serán algunos de los ingredientes que no podrán faltar.
Además, si en 2019 las bodas estuvieron marcadas por la hegemonía del verde (greenery), el próximo año las bodas estarán llenas de color. Sobre todo, cuatro serán los principales: el verde neo mint que será el gran sustituto del rosa millennial que tanto hemos visto en las bodas de los últimos años, el cassis (ni muy rosa, ni muy púrpura), el amarillo y el azul denim, aportando un toque fresco. De todas maneras, el blanco continuará siendo el protagonista en estas celebraciones, especialmente en el vestido de la novia, que, tal y como se recoge en el Libro Imprescindible de las Bodas, es el elegido por 9 de cada 10 novias para su vestido.
Look pomposo para ella y adiós al negro para él
Los vestidos románticos arrasarán, aunque los clásicos rompedores también llegan pisando fuerte. Vestidos pomposos, con mangas exageradas, faldas de tul, corsé, adornos y encajes serán el must have de toda novia. Como complemento indispensable, los peinados con clips, perlas y diamantes pondrán el broche final a un look rompedor y lleno de magia.
Para el novio, la tendencia más llamativa es que el clásico negro deja paso a las chaquetas en azul marino, verde agua y al cobalto. De esta manera el novio también gana protagonismo y puede crear un look más rompedor, sin dejar de lado el clásico esmoquin y el traje, siendo este último el que más adeptos tiene en España, ya que más del 75% de novios lo eligen para dar el “sí, quiero”, según el Libro Imprescindible de las Bodas.
Un derroche de romanticismo y detalles que marcarán las bodas de 2020 en la esencia, la decoración y en los looks de las parejas. Todo ello combinado con una característica que nunca pasa de moda: el deseo de las parejas de poder tener su día soñado, rodeado de amigos y familiares y celebrar el amor que sienten el uno por el otro.