Un invento para controlar el ordenador con los ojos hace accesible las nuevas tecnologías a personas con movilidad reducida

Ana Rodríguez. Dicen que el amor mueve montañas, y fue precisamente este sentimiento el que impulsó un invento que está permitiendo a personas con graves enfermedades poder comunicarse. El Irisbond es un ejemplo más de que la tecnología está al servicio del ser humano, contribuyendo a hacer sus sueños realidad y más felices a los que nos rodean. Este aparato hace posible controlar tan sólo con la mirada un ordenador, accediendo a todas las funciones de éste. Toda una maravilla cuando la movilidad de la persona es muy reducida y le impide relacionarse con normalidad.

Los creadores de este aparato son españoles, un equipo pequeño, pero muy cohesionado, de profesionales de la Ingeniería, la Informática y la Gestión que se unió para poner en marcha la empresa del mismo nombre, Irisbond. Uno de sus socios fundadores y CEO de la entidad es Eduardo Jáuregui, quien pone de relieve que el nacimiento de esta tecnología hunde sus raíces en una bonita historia: “a principios de la década del 2000, dos socios buscaban un sistema de comunicación alternativo porque la esposa de uno de ellos estaba afectada por la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA). En el año 2007, iniciaron una colaboración con el Centro Tecnológico Vicomtech-IK4 -puntero en la investigación aplicada en Computer Graphics y Visual Computing y nuestro actual socio tecnológico– para investigar y desarrollar una tecnología en España que permitiera acceder a un ordenador mediante la mirada. Pasó un tiempo y estos socios, por razones de edad, decidieron jubilarse. Entonces, y después de seis años de investigación, nació Irisbond en julio de 2013 para llevar al mercado esa solución tecnológica, basada en un hardware y un software innovadores”.

Así nació esta startup, que tiene año y medio de vida, y que está centrada en la tecnología y la búsqueda de la innovación. Además, todas las personas que trabajan en ella están “firmemente implicadas y comprometidas con el mundo de la discapacidad. Desde que comenzamos nuestra actividad, ya éramos plenamente conscientes de que disponíamos de una tecnología, de una herramienta, tremendamente eficaz para mejorar la calidad de vida, la autoestima, el auto-valimiento, las ganas de plantar cara a la enfermedad… de estas personas, ya que a través del control del ordenador con el movimiento de los ojos, esos enfermos que estaban absolutamente aislados por su dolencia, consiguen abrir una ventana al mundo y comunicarse con amigos y familiares, leer, escribir, ver una película… Esto es muy gratificante para nosotros”, indica Jáuregui.

Por tanto, la empresa está muy centrada y orientada al mercado de la accesibilidad, ya que personas con problemas de movilidad en las extremidades superiores y habla pueden, con esta tecnología, manejar el ordenador y acceder a sus funciones habituales como leer, escuchar música, escribir y enviar mensajes por email o WhatsApp, ‘hablar’ a través de un sintetizador con sus familiares y amigos… Por ello, afectados de ELA, parálisis o daño cerebral, paraplejia, entre otras enfermedades, son los principales usuarios de este lector ocular.

Pero esta tecnología para controlar un ordenador con el movimiento de los ojos también tiene aplicaciones muy interesantes en el mundo industrial: el control de procesos que impliquen la acción de operarios con las manos ocupadas y esterilizadas –las llamadas ‘salas limpias’- en industrias farmacéuticas, médicas, alimentarias, etc.; o en trabajos que necesitan realizar acciones auxiliares en el ordenador sin desatender las funciones principales que requieren el uso de las manos como, por ejemplo, en cirugía laparoscópica, para que el cirujano pueda interactuar con el PC mientras opera; o en el mundo del automóvil para gestionar sistemas auxiliares a la conducción sin desatender los mandos principales, y un largo etcétera.

En este sentido, puede afirmarse, sin lugar a dudas, que Irisbond tiene como vocación aplicar tecnologías innovadoras de manera sostenible y con vocación social para mejorar la calidad de vida de las personas. Además, sólo hay tres empresas en el mundo, incluida la española, que hayan ideado un sistema como éste para controlar con la mirada dispositivos electrónicos. “Competimos con dos grandes multinacionales, una estadounidense y otra sueca. Nuestra tecnología, según informes de expertos independientes, es tan buena como la de estas dos grandes empresas e, incluso, algunos dicen que nuestro sistema es más preciso. Además, en octubre de 2013 lanzamos nuestro producto a un precio muy inferior al de ellos. Gracias a que ofertamos una tecnología muy puntera, en muy poco tiempo nos hemos transformado en un importante actor a nivel internacional en nuestro segmento”, destaca el CEO de Irisbond.

Por otro lado, el funcionamiento de este invento, a simple vista muy sencillo, es bastante laborioso. Mediante rayos infrarrojos, los destellos que se generan en la córnea del usuario son captados por una videocámara alojada en el lector. Esa información la transfiere a la aplicación y, a través de unos algoritmos de computación, se consigue transformar los movimientos de los ojos en coordenadas cartesianas del ratón. Ello permite controlar el ordenador con la mirada de un modo muy preciso y sencillo, incluso para personas que anteriormente no habían usado nunca un ordenador.

La instalación del sistema es sencilla y además puede hacerse a distancia, algo que en Irisbond tenían muy claro a fin de alcanzar la comercialización de su solución dentro y fuera de España. En este sentido, la empresa posee un sistema de teleasistencia, una plataforma on line que le permite realizar la instalación y el mantenimiento de manera remota. Así, como señala Jáuregui, “desde nuestras oficinas en San Sebastián, instalamos los primeros equipos en varias ciudades de Argentina y Venezuela, en noviembre de 2013, sin que se produjera ni el más mínimo problema técnico. En definitiva, llegamos a cualquier rincón del mundo, siempre que disponga de conexión a Internet”.

Dicho esto, no es de extrañar que los españoles tengan ahora mismo acuerdos de comercialización en Argentina, Chile, Perú, Estados Unidos, Sudáfrica, Grecia, Francia, Irlanda, India y Finlandia y además acaben de visitar Brasil, Colombia y Chile. “El próximo mes tengo una visita muy interesante a Silicon Valley…”, afirma misterioso Jáuregui.

De cara al futuro, Irisbond se plantea seguir reforzando su proceso de internacionalización, algo que consideran completamente necesario, así como continuar trabajando mucho en I+D+i para mejorar el producto, conseguir que su tecnología no quede obsoleta y mantener su posición de liderazgo tecnológico en su área.

La entidad española también se plantea reforzar su departamento comercial y tiene abiertas varias líneas de trabajo muy prometedoras, “pero todavía es pronto para comentarlas”, indica el CEO de la empresa. Lo que sí resulta interesante es otra de las líneas de trabajo que están poniendo en marcha y que vuelve a estar vinculada con el mundo de la discapacidad, y es que desean conseguir que personas con las enfermedades antes mencionadas y que no disponen de recursos económicos puedan obtenerlos a través de su trabajo en un ordenador utilizando este dispositivo. “Estamos intentando involucrar a entidades públicas y privadas en este interesante proyecto que supone la inclusión laboral de personas afectadas por enfermedades muy serias. Este es un proyecto realmente atractivo y que tiene mucho que ver con la vocación de Irisbond”, pone de relieve Jáuregui.

El emprendimiento, la innovación y el espíritu de integración y ayuda de esta empresa española no ha pasado desapercibido y, en muy poco tiempo, han logrado varios premios que reconocen su esfuerzo y dedicación, como son el Premio Toribio Echevarría, Emprendedor XXI, el Reto Ability de los Telefonica Ability Awards y el Premio Reina Sofía de Tecnologías de la Accesibilidad. La plantilla está viviendo tales galardones como una experiencia “muy gratificante y con un sano orgullo, porque siempre se agradece que se premie la innovación tecnológica y el trabajo por la discapacidad. Estamos muy honrados, muy satisfechos y tremendamente agradecidos. A la vez, son un importante acicate y estímulo para seguir trabajando”, destaca el representante de Irisbond.

Así pues, lo que nació del amor de un esposo a su mujer no podía tener otro final que el del éxito, ya que ese afecto se ha acabado convirtiendo en una herramienta que está mejorando la vida de mucha gente en todo el mundo y que está llevando el nombre de España por los derroteros de la innovación tecnológica y la accesibilidad.