C.N. Huétor Tájar es un municipio andaluz situado en el llamado Poniente granadino, al oeste de la provincia de Granada. Se asienta en la fértil vega creada por el río Genil, lo que le proporciona una gran riqueza agrícola.
Su economía se sustenta sobre la base de esta actividad agrícola, con cultivos de espárragos con denominación de origen y alcachofa principalmente, de la que deriva la industria alimenticia con la conservación de espárrago y alcachofa. La producción agrícola del espárrago ocupa a más del noventa por ciento de la población, haciendo de éste un preciado manjar en honor al cual se realiza la “Fiesta de Recogida del Espárrago”.
De este modo, como no podía ser de otra manera, este producto es el principal protagonista de la gastronomía hueteña, siendo imprescindible en muchos platos salados o dulces, desde ensaladas, revueltos, cremas, hasta mermeladas o pasteles.
Con el objetivo de facilitar el crecimiento y desarrollo del sector agroalimentario, estratégico en el Poniente ganadino, y generar riqueza y puestos de trabajo en la localidad, el Ayuntamiento de Huétor Tájar, en colaboración con la Diputación Provincial, han impulsado la creación del Centro Agroalimentario de Innovación y Tecnología del Poniente Granadino, un proyecto que se viene desarrollando desde hace años y que abrirá sus puertas en 2015. Su puesta en marcha supondrá la creación de un ‘cluster’ o agrupación de pequeñas y medianas empresas del sector, para mejorar la competitividad, centrándose sobre todo en la creación de cauces para la exportación como eje principal de comercialización de sus productos.
El centro de investigación, que será pionero en Andalucía, ha supuesto la inversión de más de un millón de euros en el municipio, y supondrá “un verdadero motor para la economía de esta comarca granadina”, ha manifestado el alcalde de Huétor Tájar, Fernando Delgado Ayén. El citado centro tomará como base el Centro de Investigación y Formación Agroalimentaria que el ayuntamiento ha construido mediante una escuela-taller, y que será dotado de equipamiento gracias a la financiación obtenida a través de fondos FEDER de la Unión Europea, la Diputación de Granada y el propio consistorio.
Para Delgado Ayén, este ambicioso proyecto “tiene como objetivo dinamizar la economía comarcal mediante la investigación y la innovación, que tanta falta hace en nuestra provincia, y en el apoyo a la cooperación empresarial. Queremos que el centro sea una referencia a nivel andaluz”.
El nuevo centro estará equipado con la última tecnología de laboratorio para la realización de I+D+I, junto a varias aulas de formación e instalaciones para el asesoramiento del empresariado y podrá beneficiar a empresarios de subsectores como el de las frutas y hortalizas, lácteo, cárnico, pescados o bebidas, además de la industria auxiliar y de envases y embalajes.
Formación de expertos. La puesta en marcha de este centro coincidirá con una nueva oferta formativa, pues Huétor Tájar se convertirá en el primer municipio de Andalucía Oriental donde podrá estudiarse el ciclo formativo de Grado Superior en Procesos y Calidad en la Industria Alimentaria. La Consejería de Educación de la Junta de Andalucía ha dado luz verde a la implantación de esta titulación en el IES Américo Castro, que a partir del curso que viene, en septiembre, ofertará estos estudios.
El municipio del Poniente granadino se convertirá así en el segundo pueblo de toda Andalucía donde se podrá estudiar este Grado Superior, unos estudios cada vez más demandados en la actualidad, dado el amplio abanico de salidas profesionales con el que cuentan.
Fernando Delgado Ayén, ha destacado que “con la implantación de este grado en nuestro municipio perseguimos dos objetivos: por un lado, dotar a las empresas de jóvenes formados específicamente en organizar y controlar los procesos de elaboración de productos alimenticios y, por otro, ofrecer a los jóvenes una cualificación profesional y laboral que casi no existe en Andalucía”.
En la actualidad las empresas alimentarias manifiestan dificultades para encontrar mandos intermedios cualificados. Con este Ciclo Formativo de Grado Superior, “pretendemos proporcionar a los jóvenes una buena salida profesional, desempeñando funciones como técnicos de análisis de alimentos, técnicos en análisis sensorial, técnicos en seguridad alimentaria, técnicos y auditores en control de calidad o técnicos en control de producción y trazabilidad, entre otros”, ha apuntado el primer edil.