Redacción. La Policía Nacional ha intervenido en Murcia 22 paquetes de heroína con un peso bruto de 11,5 kilogramos procedentes de Holanda y ha detenido a 17 personas, de entre 19 y 55 años, como presuntos autores de delitos contra la salud pública, tenencia ilícita de armas y pertenencia a organización criminal.
Según ha informado el Ministerio del Interior, los agentes de la Policía Nacional han intervenido asimismo 10.500 euros en efectivo, seis vehículos, un revólver con munición y diferentes instrumentos relacionados con el tráfico de drogas.
El febrero pasado, los investigadores comenzaron a indagar sobre un grupo que ya había sido investigado en 2011. En aquel entonces, la Policía incautó 21 paquetes de 500 gramos de heroína y detuvo a 33 personas de tres clanes dedicados a la venta de estupefacientes, si bien las líneas de abastecimiento de la droga quedaron operativas.
De esta manera, la Policía ha logrado localizar a los líderes de la banda, dos personas que residían en San Pedro del Pinatar (Murcia) y que eran los encargados de contactar con los proveedores de heroína en los Países Bajos. Éstos suministraban la sustancia estupefaciente y la trasladaban en vehículos preparados al efecto, con compartimentos practicados en el chasis de difícil acceso y sofisticados sistemas de ocultación de la droga. Así coordinaban el envío y traslado de la sustancia estupefaciente desde Holanda hasta Murcia.
En relación con el transporte de la droga, éste se realizaba en su mayoría por miembros de origen magrebíes con nacionalidad holandesa que cobraban, en función de los kilos de droga que desplazaban, un montante final al llegar a su destino en Murcia y entregar la droga a los jefes de la organización criminal.
Posteriormente, se identificó a otros miembros del grupo, tres hombres y dos mujeres, encargados de la recepción de la partida de estupefaciente en Murcia y su ocultación en domicilios de seguridad. Para abastecer a otros integrantes de la red, el grupo usaba las mochilas de colegio de sus hijos, que junto con ellos, trasladaban y entregaban la droga al distribuidor final.
Cuando se había vendido toda la heroína, un miembro de la banda en España se trasladaba en avión a Holanda con grandes cantidades en efectivo en su equipaje. Este investigado fue detenido con 18.500 euros en efectivo el pasado mes de abril en el aeropuerto holandés de Rotterdam.
