Redacción. La Guardia Civil, con la colaboración de la agencia Europol, en el marco de la operación “STUDENT” desarrollada en la provincia de Málaga, ha detenido en la localidad de Benahavís a un ciudadano de origen italiano dedicado al proceso de oferta, venta y distribución de productos de marcas falsificados a nivel internacional a través de Internet.
Se trata de uno de los mayores distribuidores de productos de marca falsificados. Una de las marcas de prendas deportivas más conocidas a nivel internacional le considera su principal amenaza, debido al volumen de venta que facturaba. Se calcula que, solo a esta marca, ha causado un perjuicio económico cercano a los 2 millones de euros.
Se ha procedido al registro de un domicilio, donde se han intervenido múltiples equipos informáticos y distintas muestras de productos falsificados, derivándose el bloqueo de distintos bienes muebles e inmuebles adquiridos en territorio nacional y de los productos y cuentas bancarias vinculadas con movimientos sospechosos de la actividad que desarrollaba el ahora detenido.
La operación se inició en el 2014, a raíz de la denuncia presentada por el representante en España y Portugal de una marca muy conocida, tras haber detectado en Internet la oferta de productos falsificados de esa marca.
En la investigación los agentes pudieron comprobar cómo esta persona, no sólo no se limitaba al ofrecimiento de una corta cantidad de producto, sino que alardeaba sobre la tenencia de un considerable stock de efectos que podría servir en un breve espacio de tiempo.
Igualmente se detectó que, una vez entablado el contacto entre el defraudador y el cliente potencial, concertaban una serie de citas telemáticas que siempre seguían la misma secuencia, es decir, envío de muestras de los productos requeridos, confirmación y pago de una señal económica. Una vez escogido el material, acordaban la entrega definitiva y el pago final de la transacción, proceso en el que se adoptaban unos patrones de seguridad extremos.
Fruto de la investigación se pudo comprobar que la actividad desarrollada por el delincuente en nuestro país no era nueva, ya que anteriormente había sido investigado en países como Italia o EEUU, aunque en ellos no llegaron a desarrollar los procedimientos abiertos contra el mismo.
Sociedades afincadas en Hong Kong-China y Brasil. Los investigadores detectaron sociedades afincadas en países extracomunitarios (Hong Kong-China y Brasil) directamente relacionadas con la actividad que desarrollaba esta persona, y que jugaban un papel de suma importancia tanto en la importación del material falsificado como en la canalización de los beneficios económicos obtenidos con la actividad criminal.
Una vez recabada toda la información, los agentes pudieron constatar que todas las maniobras efectuadas por el detenido se realizaban desde su vivienda de la localidad malagueña de Benahavís. Asimismo, se pudo vincular su lugar de residencia con las conexiones telemáticas que servían para formalizar la oferta y venta de producto falsificado.
De forma paralela y dada la alta calidad de vida que aparentaba el detenido, los agentes pudieron acreditar que esta persona no ejercía una actividad laboral remunerada y además no había efectuado sus correspondientes declaraciones societarias/físicas en territorio nacional, por lo que podría estar cometiendo un delito de blanqueo de capitales.
Una vez vinculada esta persona con la actividad continuada en la comisión del delito contra la propiedad industrial utilizando medios telemáticos, se procedió a su detención.
En relación con la mercancía falsificada que se ofertaba cabe destacar que disponía de una calidad excelente y que pasaba completamente inadvertida como falsificación para el comprador de la misma, aunque lógicamente se abarataba el coste en torno a la mitad o incluso menos con respecto al producto original.
Con el desarrollo de esta operación se ha puesto freno a uno de los mayores delincuentes en el ámbito de la Unión Europea dedicados a la venta al por mayor de falsificaciones por medios telemáticos/informáticos.
La operación ha sido desarrollada por el Área de Patrimonio de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Málaga.