Europa Press. Las universidades españolas destinaron un total de 9,99 millones de euros en 2013 a proyectos de cooperación y a ayuda a países en vías de desarrollo, según un informe publicado por el Observatorio de Cooperación Universitaria al Desarrollo de la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas (CRUE).
La mayor parte de los fondos, el 96%, lo aportaron entre las 48 universidades públicas del país mientras que el cuatro por ciento proviene de universidades privadas.
La principal partida de fondos (el 31,44% del total) se destinó a gastos de administración y a gestión de la ayuda, aunque el informe recuerda la necesidad de poner el dato en relación con «la cantidad de fondos ajenos que gestionan las universidades», más del doble que los aportados por las propias universidades (20.851362 euros).
Asimismo, los proyectos de ayuda universitaria supusieron el 24,47% del total de fondos gestionados y un 18% se dedicó a financiar becas de formación para estudiantes de los países receptores de ayuda. Otra de las partidas de cooperación fue la realización de programas de master y posgrado vinculados al desarrollo, a la que se destinó el 11% del presupuesto.
También se realizaron asistencias técnicas en los países receptores de ayuda, programas de voluntariado y de fortalecimiento institucional, entre otras iniciativas, que supusieron el 6,38% del presupuesto; acciones de sensibilización (5,71%) y se concedieron becas a estudiantes españoles para que realizaran parte de sus estudios en otros países (5,24%).
Por regiones, las ayudas se distribuyeron de forma homogénea con las «prioridades» de la cooperación española, según destaca el estudio, aunque el 44,51% de las ayudas registradas no aporta información sobre el país de destino. De los fondos de los que sí consta este dato, el 19,4% fue a parar a países de América del Sur, mientras que América del Norte, Central y el Caribe recibieron el 13,83% de las ayudas. A su vez, el 9,72% se destinó a países de la región de África Subsahariana y el 8,64%, al norte del continente.
El informe atribuye el desconocimiento de los países de destinos de parte del presupuesto para cooperación a que «en su mayoría se trata de acciones de sensibilización, gastos administrativos y formación en España vinculada con el desarrollo».
Por último, el documento destaca los principales objetivos de los proyectos de cooperación llevados a cabo por las instituciones universitarias. Por un lado, figuran las iniciativas con «enfoque de género», que suponen más de la mitad del total, y aquellas dirigidas a la conservación o mejora del medio ambiente, que representan el 21,76%.
Además, el 35% fueron destinados a proyectos relacionados con la educación superior en los países en vías de desarrollo y el 4,6% a proyectos de investigación no relacionados con la educación para el desarrollo. «También tienen importancia otras infraestructuras y servicios sociales básicos, acciones vinculadas a la sensibilización y a la educación para el desarrollo y, por supuesto, los gastos de gestión», según indica el informe.
