Redacción. El misionero Manuel García Viejo, que está ingresado con ébola en el Complejo Hospitalario La Paz-Carlos III de Madrid, ha sufrido un «empeoramiento dentro de la gravedad que ya mantenía» tras haberse infectado por el virus en Sierra Leona, según han confirmado fuentes de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios (OHSJD) a la que pertenece.
El religioso lleva ya más de tres días ingresado y hasta ahora se encontraba «estable» dentro de su «delicado» estado de salud. Además, se siguen estudiando posibles alternativas terapéuticas experimentales relacionadas con el tratamiento de la enfermedad.
García Viejo ha pedido que se mantenga la privacidad sobre su estado de salud. Asimismo, desde la Orden han pedido «paciencia y cautela» y han reiterado su agradecimiento a los profesionales que le están tratando «por todos los cuidados y esfuerzos que están realizando y la atención que le están prestando».
El paciente ingresó en la madrugada de este lunes en el Complejo Hospitalario La Paz-Carlos III tras ser repatriado a España procedente de Sierra Leona. Al llegar a Madrid, presentaba una «importante deshidratación» y una afectación hepato-renal. Por el momento, el tratamiento que está recibiendo es «de soporte», es decir, centrado en el control de los síntomas, al no haber un tratamiento específico para combatir el virus.
Una de las terapias experimentales que se han desarrollado en los últimos meses, el ‘Zmapp’, con el que se trató al religioso Miguel Pajares también repatriado, se encuentra actualmente agotado en todo el mundo. Una situación que ha propiciado que el Ministerio de Sanidad esté gestionando posibles alternativas terapéuticas para poder tratar a García Viejo.