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Irse de vacaciones es siempre una fuente de estrés difícil de gestionar hasta el punto de no saber a qué atenerse
Según, INFOSECUR, la seguridad del hogar es una preocupación, sobre todo porque las formas de actuar de los ladrones son cada vez más diversas. Por lo tanto, es imperativo hacer todo lo posible para proteger la vivienda de cualquier robo.
Hay que tener en cuenta que ausentarse durante mucho tiempo, lo más probable es que la vivienda se enfrente a una verdadera plaga: los robos. Durante las vacaciones, los robos suelen ser más frecuentes, al contrario de lo que podría pensarse, la mayoría de ellos tienen lugar durante el día.
Por lo tanto, para protegerse de los ladrones o visitantes no deseados, hay que tomar ciertas precauciones. Afortunadamente, existen algunas medidas que pueden tomarse para reducir este tipo de riesgo:
1.- Reforzar y bloquear las aperturas
Es lógico y, sin embargo, no todo el mundo lo hace. Es esencial asegurarse de que todas las entradas de la vivienda estén cerradas con llave antes de salir.
Casi el 80% de los ladrones entran por la puerta principal. Así que, dedica el tiempo de mirar alrededor de la vivienda para asegurarse de que todo está cerrado correctamente.
Los cerrajeros profesionales, recomiendan que, para una mayor seguridad, sería ideal invertir en una puerta blindada, una cerradura antirrobo o un acristalamiento antirrobo. También existen una gran variedad de accesorios, como las barras de seguridad, que se utilizan para reforzar y aumentar la seguridad.
2.- Mantener los objetos de valor a salvo
Según, BLOG CERRAJEROS, los ladrones suelen dedicar tiempo para investigar cuál será su próximo objetivo, y asegurarse de que los ocupantes no están presentes antes de actuar.
Es importante que los propietarios que tengan joyas u objetos de valor se aseguren de que estén bien protegidos. Al poseer una caja fuerte, es primordial guardarlos en ella antes de irse de vacaciones o ausentarse varios días.
Es necesario hacer fotos de todos estos objetos y de guardar los certificados y las facturas. En caso de robo, todo esto será muy útil a la hora de tratar con la compañía de seguros.
3.- Instalar una alarma o un sistema de monitoreo remoto
Hoy en día, con los numerosos avances tecnológicos, es posible equipar la vivienda con una o varias cámaras.
Las alarmas son muy útiles para disuadir, pero también para intervenir en caso de robo. Cámaras, sistemas de detección de movimiento, de golpes o rotura de cristales, hay muchas soluciones que se adaptan a todos los hogares.
Algunos modelos conectados le permiten incluso ver lo que ocurre en la vivienda, directamente desde el teléfono móvil.
También se puede optar por tener la máxima seguridad recurriendo a una empresa especializada. Estas empresas suelen estar formadas por especialistas en el ámbito de vigilancia y cuenta con todo el equipo necesario para garantizar la seguridad del hogar.
4.- Ser discreto y no anunciar la fecha de las vacaciones
Una casa que está temporalmente deshabitada es un objetivo ideal para los ladrones. Ya sea dinero, pequeños muebles, joyas, equipos multimedia, los ladrones harán cualquier cosa para apoderarse de la vivienda.
Por lo tanto, para proteger la vivienda contra los robos durante su ausencia, se recomienda encarecidamente ser discreto en cuanto a la salida, ya que esta información es muy valiosa para un ladrón.
No es necesario revelar innecesariamente la fecha de la salida, y mucho menos la del regreso en las redes sociales.
5.- Fingir presencia
¿Qué es más disuasorio que una casa habitada? Es cierto que a veces la presencia de los propietarios no ahuyenta a los ladrones, pero todavía hay más riesgos para ellos. Así que, mientras se encuentre fuera de casa, es necesario realizar todo lo posible para que parezca que hay alguien dentro de ella.
La domótica es muy útil en este caso ya que puede programar la apertura y el cierre de las persianas, encender luces o la televisión: lo suficiente para crear una ilusión perfecta.
En caso, de que la vivienda no está conectada a la domótica, puede recurrir a una persona de confianza para recoger el correo, abrir y cerrar las persianas de vez en cuando, etc. De este modo, la vivienda está habitada y vigilada durante su ausencia.
6.- Elegir puertas que ofrezcan máxima seguridad
Cuando se trata de robos, la puerta es sin duda el punto de entrada preferido por los ladrones. Por ello, la puerta requiere la máxima atención, se aconseja elegir una puerta blindada que tenga una alta resistencia a cualquier impacto. Entre otras cosas, debe tener dispositivos de cierre multipunto y cerraduras difíciles de forzar.
Independientemente del tipo de puerta que se tenga en la vivienda, se puede reforzar instalando bisagras antirrobo.
7.- Asegurarse de que ninguna entrada de la casa sea accesible
Aunque la puerta es el principal medio por el que los ladrones entran a las viviendas, como se ha mencionado, esto no significa que deba descuidar las demás aberturas de la casa.
Por ejemplo, las persianas deben estar cerradas en las habitaciones, así como en los baños y otras ventanas secundarias.
Se puede instalar protecciones delante de las aberturas de las ventanas que sean menos visibles desde el exterior para aumentar el nivel de seguridad. Por lo tanto, aparte de los cristales especiales, ninguna superficie acristalada de la casa debe quedar sin protección durante las vacaciones.
Para finalizar, seguir estos consejos seguramente le ayudará a reducir el riesgo de sufrir un robo durante las vacaciones. Sin embargo, hay que tener en cuenta que no existe el riesgo cero.
Fuente Comunicae