Redacción. La incontinencia urinaria es uno de los trastornos que más afectan a las mujeres a partir de la madurez. La incidencia en España es de alrededor de un 24% en mujeres, que aumenta hasta aproximadamente un 35% de las mujeres de edad más avanzada. Es habitual que aparezca tras un embarazo (especialmente tras el segundo) y después de la menopausia. También es frecuente en hombres mayores, y se estima que la sufren aproximadamente unos 200 millones de personas en todo el mundo.
Básicamente, la incontinencia urinaria se refiere a la incapacidad para retener la orina, lo que provoca pérdidas involuntarias, especialmente cuando se realiza alguna clase de esfuerzo, como reír, toser o hacer ejercicio. La incontinencia urinaria puede responder a múltiples causas, como problemas neurológicos o demencias, que pueden afectar a la capacidad para controlar la musculatura de la vejiga, o percibir la sensación propia de las ganas de orinas, problemas musculares y nerviosos, debilidad de los músculos uretrales o pélvicos, o problemas u obstrucción en el aparato urinario.
La incontinencia urinaria puede aparecer súbitamente para desaparecer en poco tiempo o ser persistente. Existen algunos medicamentos que pueden producir este efecto temporalmente, así como algunas circunstancias como la recuperación de una cirugía, el embarazo, o infecciones de las vías urinarias, entre otras.
En otras ocasiones, las causas de la incontinencia pueden alargarse, como puede ser la enfermedad de Alzheimer, el cáncer de vejiga, la diabetes o la hiperplasia prostática. En las mujeres puede darse un deslizamiento de la vejiga hacia el espacio vaginal, conocido como cistocele,frecuentemente causado por el embarazo y el parto, que también provoca esta condición.
A la vista de las diferentes causas, existen, por tanto, diferentes tipos de incontinencia urinaria: incontinencia de esfuerzo, muy común en mujeres cuando se debilitan los músculos pélvicos; la incontinencia de urgencia, común en personas mayores, y que se da cuando la necesidad de miccionar se da de manera muy súbita; incontinencia por rebosamiento, cuando la vejiga está muy llena y se pierden pequeñas cantidades, frecuente en hombres por aumento del tamaño de la próstata u obstrucción del tracto urinario, incontinencia funcional, si hay dificultades de movilidad que impiden llegar al baño a tiempo, y finalmente incontinencia mixta, cuando aparecen a la vez varios de tipos antes mencionados.
La incontinencia urinaria, es una enfermedad muy común, y los datos indican que en España y otros países de Latinoamérica es una enfermedad infradiagnosticada debido al estigma y rechazo social que puede producir. Por eso es importante concienciar a los pacientes de que consulten a su médico o acudan a una clínica urológica especializada para poder llevar a cabo un diagnóstico correcto de las causas y poder comenzar a tratarla con los métodos apropiados.