Las difíciles situaciones económicas requieren que se cumpla un presupuesto mensual marcado por las necesidades urgentes. Ésta es una medida preventiva que ayudaría al buen manejo del dinero y a cumplir un orden previamente establecido para no caer en gastos tontos e innecesarios.
Las finanzas de un hogar pueden mejorar siempre que todos los miembros cooperen como un equipo y aporten soluciones para sustentar la economía familiar. Algunas claves que ayudan a sobrellevar la crisis son muy sencillas. En primer lugar, al hacer la compra, es recomendable llevar encima una lista de los productos realmente necesarios para así evitar comprar cosas por impulso. No hace falta que lo que compremos sea de marcas conocidas, puesto que las marcas blancas suelen tener una calidad similar y son más baratas. En caso de que algún día tengamos que comer fuera por estudios o trabajo, debemos evitar los restaurantes en favor de los tuppers, una idea mucho más económica.
Para la ropa, lo más conveniente es comprar en rebajas. Podemos comprar en las rebajas de enero la ropa que necesitemos para el próximo verano, que estará a un precio realmente bajo, y en las rebajas de junio, la ropa de invierno, con lo que ahorraremos una gran cantidad de dinero. Asimismo, para cualquier compra, es conveniente aprovechar todos los cupones y descuentos que tengamos.
Está claro que aunque no estemos en nuestra mejor situación económica, el ocio es verdaderamente importante en el día a día. Cabe destacar que los Ayuntamientos suelen ofrecer actividades realmente interesantes y, en su mayoría, gratuitas. En caso de que queramos ir al cine, lo mejor será aprovechar el “día del espectador” para que no vaciar mucho nuestro bolsillo.
Si todos estos trucos funcionan, pero aun así no son suficientes, podemos pedir créditos rápidos en plataformas online como la de Credy24 u otras similares. Se trata de páginas web que ofrecen préstamos de manera muy cómoda y rápida. La solicitud del dinero deseado se puede hacer desde nuestra propia casa en cualquier momento, ya que los portales virtuales de este tipo están disponibles las 24 horas sin limitación de horarios.
Además, el proceso para la petición es muy sencillo: simplemente se selecciona la cantidad y el plazo de devolución deseados y, acto seguido, aparecen las condiciones que se aplicarán al crédito. En dicho momento, debemos fijarnos en varias cuestiones: los tipos de interés que aplica el prestamista para estar seguros de cuánto pagaremos finalmente y las diferentes comisiones (de apertura, de cambio de condiciones, de cancelación anticipada u otras), puesto que en alguna ocasión pueden encarecer el préstamo solicitado.
Los créditos rápidos son una solución bastante efectiva para muchas personas puesto que normalmente son concedidos con bastante facilidad a personas sin nómina, sin aval o que aparezcan en una lista de morosos. A pesar de esta gran ventaja, antes de decidirnos a solicitar un préstamo online debemos fijarnos en ciertas características personales como la estabilidad laboral o el nivel de endeudamiento que tenemos hasta dicho momento, para estar seguros de que podremos hacer frente a los pagos futuros para la devolución del dinero.