‘Vaiana’, otro desfile del talento de la Disney

Un frame de 'Viana'.
Un frame de ‘Vaiana’.

Carlos Fernández / @karlos686. “Esta es mi opinión hoy y en este momento de mi vida”. La todopoderosa Disney sigue avanzando dando pasos hacia arriba con su nueva película: Vaiana. Tradicional en su planteamiento (la dirigen los responsables de La sirenita y Aladín) y moderna en sus valores e ideas, Vaiana narra la historia de una joven isleña que vivió hace miles de años y que fue elegida por el océano para salvar el mundo de la oscuridad producida por la ira de la madre naturaleza. Esto garantiza una Disney activa con los valores e ideas de hoy (en cuenta a la naturaleza y al feminismo), respetando las normas que tan alto les ha permitido llegar.

No es una película feminista por abordar el papel de mujer como heroína, más bien lo es porque ni siquiera se esfuerza en recalcar en todo momento que eso es así. Normalizan lo que debe ser normal y por eso la Disney sigue escalando en estos personajes femeninos tan fuertes y valientes. La historia empezó con Frozen, ahora sigue Vaiana; espero que el siguiente paso sea, como es Vaiana, hacia arriba.

Disney ha interiorizado bien los valores e ideas de hoy día sin renunciar al lirismo, la aventura o, simplemente, el entretenimiento de calidad. La película trata temas como la identidad, el coraje, el amor, el perdón y la comprensión. Todo ello gobernado por unos personajes encantadores, con los que se logra empatizar, divertidos y emocionales. Lo único malo es que, como ya he dicho en resumidas cuentas, Vaiana no inventa el fuego y todo lo que vemos es tan Disney como todo lo anterior: colorines, canciones, grandes efectos visuales, mucho ordenador y muchas buenas decisiones al servicio de una productora cada vez más madura pero, a la vista de todos los remake que realiza y que pretende realizar, algo despistada.

Una innegable muestra de talento que todos conocemos ya, otro desfile del talento de la Disney en casi todos sus apartados técnicos y artísticos al servicio de contentar a un público cada vez más amplio: el que quiere lo de siempre sin importar nada más, y uno más exigente que quiere evolución acorde a nuestros días. Si siguen así, harán una obra maestra en breve. Vaiana no lo es pero, seas adulto o no, ve a verla.

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