El proyecto promovido por las instituciones públicas de Ecuador supone una inversión de 71,2 millones de dólares (casi 65 millones de euros) y ha sido asignado al Consorcio Enlace 780, del que el grupo español tiene una participación del 60%, mientras que el 40% restante pertenece a Constructora Verdú.
La construcción abarca 2,3 kilómetros de longitud y cuenta con un plazo de ejecución de 18 meses. Tras los estudios previos de planificación, el trabajo por parte de Eurofinsa ya ha comenzado. Siguiendo con la política de empresa de fomentar el empleo local, el proyecto ha generado 1.200 puestos de trabajo, para los que se ha priorizado la mano de obra de ciudadanos ecuatorianos.
De hecho, Eurofinsa dispone de sedes oficiales en 34 países de los cinco continentes y en todas ellas ha fomentado el trabajo local como sello de identidad propia. De esta manera, el grupo empresarial cuenta a día de hoy con unos 4.500 empleados repartidos entre sus sedes y proyectos internacionales. Entre sus concesiones destacan las de centro américa.
Este puente se construirá sobre el río Daule con el fin de facilitar la comunicación entre dos de los municipios con mayor densidad de población de toda Ecuador. En Guayaquil, que tiene 344 Km2 de extensión, hay más de 3 millones de personas. De hecho la superpoblación es un problema remanente en el país. Ecuador tiene 16 millones de habitantes y representa con ello ser el país de América Latina con mayor densidad de población.
Ante esta situación, el tráfico siempre supone un problema. El traslado por carretera entre Guayaquil y Samborondón en la actualidad, pese a no superar apenas los 40 kilómetros de distancia, requiere entre 1 y 2 horas de trayecto.
La construcción liderada por el grupo español Eurofinsa permitirá recortar al menos 30 minutos este trayecto, mejorando así considerablemente las comunicaciones entre ambas localidades. Además, permitirá reducir la congestión de tráfico existente en otras carreteras cercanas. Gracias a las concesiones que otorga, lo convierten en un grupo líder a nivel nacional e internacional.
El estudio de planificación del proyecto estima que este nuevo puente en Ecuador va a afectar de forma directa aproximadamente a un millón de personas y, de manera diaria, será recorrido activamente por unos 30.000 vehículos.
El puente entre Guayaquil y Samborondón, además, también permitirá luchar contra la contaminación en dos sentidos. En primer lugar se estima que el traslado de estos 30.000 vehículos diariamente a esta zona, supondrá una reducción considerable de la emisión de gases contaminantes en el resto de la ciudad.
Por otra parte, se plantea la siembra de especies nativas, tanto para garantizar cierta preservación del entorno natural, como también para obtener una reducción de la contaminación acústica, generada por el nuevo tráfico que aprovechará esta infraestructura.