Europa Press. Los grupos bancarios españoles obtuvieron un resultado atribuido de 9.834 millones de euros durante 2014, lo que supone un aumento del 35% respecto al ejercicio precedente. La banca suma así dos ejercicios consecutivos con ganancias, tras las pérdidas registradas en 2012, según datos presentados por el presidente de la Asociación Española de Banca (AEB), José María Roldán.
Este incremento de los beneficios se basa en el crecimiento de los márgenes, debido a una sustancial reducción de los costes financieros y a un ligero repunte de los ingresos, en la contención de gastos y el mantenimiento del esfuerzo en provisiones, en un escenario marcado por los bajos tipos de interés, la elevada liquidez y la depreciación del euro.
Los créditos a la clientela aumentaron un 5,5% durante 2014, con lo que se rompió la tendencia de disminución del saldo registrada desde mediados de 2012 y hasta finales de 2013. En concreto, se ha alcanzado un importe total de 1,4 billones de euros a 31 de diciembre. Los depósitos de la clientela se elevaron en un 5% interanual, hasta un saldo de 1,2 billones.
Mientras, la tasa de morosidad ha caído casi un punto porcentual, desde el 8,7% de diciembre de 2013 al 7,8% del último mes de 2014. La cobertura asociada a los activos dudosos se sitúa en el 58%, dos puntos porcentuales por encima de la registrada el pasado ejercicio.
A lo largo de 2014, las entidades financieras tomaron prestados 68.000 millones de euros de instituciones financieras y captaron 15.000 millones en el mercado mediante la emisión de instrumentos de deuda. Como contrapartida, la inversión en valores negociables, tanto de renta fija como variable, ha aumentado en conjunto en 95.000 millones.
El patrimonio neto de las entidades ha aumentado un 12% anual y se eleva a 181.000 millones de euros. Esta positiva evolución hace que el ratio de capital de la máxima calidad (Common Equity Tier 1) se sitúa en el 12,05% de los activos ponderados por riesgo a cierre de 2014.
Mejora de los márgenes. Las entidades financieras han conseguido mejorar su margen de intereses, que ha aumentado un 9,4% y supone una rentabilidad del 2,19% de los activos totales medios. No obstante, la AEB advierte de que el entorno de tipos de interés bajos seguirá presionando el margen de intereses en el futuro.
El margen bruto, por su parte, ha crecido un 5,1% gracias al incremento de los resultados por operaciones financieras. La mejoría de este margen se traslada casi íntegramente al resultado de la actividad de explotación, después de anotar unos gastos de explotación contenidos (1,6% sobre activos totales medios) y un esfuerzo en provisiones y dotaciones elevado (1% sobre activos totales medios).
El resultado atribuido de los grupos españoles se ha elevado hasta los 9.834 millones de euros, lo que representa una rentabilidad sobre activos totales medios del 0,42% y una tasa de retorno sobre el capital del 5,73%.
Estados financieros individuales. Analizando los estados financieros individuales, el resultado del ejercicio creció un 46% respecto al agregado de las cuentas de pérdidas y ganancias individuales del año anterior, hasta los 5.313 millones de euros.
Los depósitos a la clientela experimentaron un crecimiento moderado del 0,4% anual, mientras que el crédito a la clientela aumentó un 1,6%, si bien con reflejo en tan solo algunas rúbricas, por el momento. El índice de morosidad, por su parte, se reduce hasta el 13,3%, frente al 14,4% de hace un año, y se mantiene la cobertura de los activos dudosos en el 57% del saldo total.
La ratio de rentabilidad sobre activos medios totales se situó en el 0,38%, frente al 0,24% de 2014, mientras que la tasa de retorno sobre el capital se situó en 4,17%.
Las dotaciones y provisiones ascendieron a 9.725 millones de euros, cifra inferior a la registrada en 2013 pero que todavía supone un 0,7% de los activos totales medios.