Redacción. Los Mossos d’Esquadra y la Guardia Civil han detenido a 24 miembros de una banda de ladrones presuntamente dedicada a robar vehículos de alta gama en países de la Unión Europea para enviarlos a Marruecos y desde allí venderlos en Mauritania y Senegal.
Según han informado ambos cuerpos policiales, en la operación fueron detenidas el 10 de marzo un total de 24 personas de nacionalidad española y marroquí en Barcelona, Cádiz, Toledo, Vizcaya y Alicante. Les atribuyen los presuntos delitos de pertenencia a organización criminal, robo y hurto de uso de vehículo, apropiación indebida, receptación y falsedad documental.
La investigación arrancó en julio cuando los Mossos descubrieron a un grupo dedicado a introducir todoterrenos robados en toda Europa desde Italia hasta Marruecos, que se vendían finalmente en Mauritania y Senegal. La banda de ladrones actuaba con tres células: una primera ubicada en varios países europeos que se encargaba de robar los vehículos, otra situada en España que se encargaba de gestionar los documentos falsos y una tercera en Marruecos que trasladaba los vehículos a los países de destino.
La célula ubicada en España, con presencia en Alicante, Toledo y Cádiz, gestionaba la documentación falsa para blanquear el vehículo, la matriculación en España, el cambio de nombre mediante un testaferro y el traslado a Marruecos.
Desde Catalunya se gestionaban los contratos falsos de compraventa del vehículo a nombre de un testaferro que solicitaba a la Dirección General de Tráfico (DGT) unas placas provisionales de matriculación presentando documentación falsa de Italia, Luxemburgo y otros países. Cuando obtenían estas placas, miembros de la organización se desplazaban al país donde había sido robado el vehículo para recogerlo, tras acuñarle el mismo número de bastidor falso que constaba en la documentación falsa.
En la investigación, en la que ha trabajado un equipo conjunto de Mossos y Guardia Civil, se ha acreditado el tráfico de 33 vehículos, de los que 13 han podido ser recuperados, además de intervenir una gran cantidad de documentación que acredita la actividad delictiva.
Tras pasar a disposición judicial, los cinco jefes de la organización ingresaron en prisión, han informado los Mossos.
La operación la ha llevado la Unidad Central de Tráfico Ilícito de Vehículos de la División de Investigación Criminal de Mossos y el Equipo contra el Crimen Organizado de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil.
