Redacción. Agentes de la Policía Nacional han detenido a dos activos uploaders como presuntos autores de delitos contra la propiedad intelectual cometidos a través de Internet. Se trata de dos hombres de 22 y 43 años que han sido localizados en sus domicilios de Alicante y Vizcaya. Los investigadores estiman que entre ambos podrían haber subido a Internet en un año más de 3.000 películas y capítulos de series “piratas”. Esta actividad producía beneficios económicos para los arrestados a través de empresas de publicidad, servidores de alojamiento gratuito y colaboraciones con administradores de páginas web de enlaces.
Los dos uploaders o “subidores” presuntamente realizaron de forma continuada y lucrativa un acto de comunicación pública, consistente en la provisión de enlaces a películas y series de reciente estreno y de buena calidad, obtenidas previamente a través de grabaciones de vídeo o de audio. Este contenido audiovisual protegido y no autorizado estaba así a disposición de una pluralidad de usuarios a través de conocidas páginas web de descarga directa o visionado en línea (streaming).
Los uploaders procuraban subir las películas y series a las páginas con un mayor número de usuarios, debido a que cuanto más elevado sea el número de descargas o visionados de sus aportes, más alto será el beneficio económico que obtengan.
Los investigados disponían de diversas cuentas en un conocido sistema de intermediación financiero, en las que recibieron numerosos ingresos obtenidos de la actividad delictiva. Estos beneficios económicos provenían principalmente de las siguientes vías: empresas de publicidad, servidores de alojamiento de contenido, colaboración con otros uploaders y colaboración con administradores de web de enlaces especializadas.
Incautado material informático. Aunque siempre utilizaban nicks o apodos en Internet, los investigadores identificaron a los presuntos uploaders. En sus viviendas, los agentes se han incautado de seis teléfonos móviles, seis discos duros, un ordenador portátil, dos tablets, un mp3 con grabadora de audio, seis USB, una tarjeta USB, un lector USB de tarjetas y 19 “tarrinas” con CD y DVD de películas y juegos.
La investigación ha sido desarrollada por agentes de la Unidad de Investigación Tecnológica de la Comisaría General de Policía Judicial, con la colaboración de agentes del Grupo de Delincuencia Organizada de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Bilbao y del Grupo de Delitos Tecnológicos de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Alicante.
