Europa Press. Las exportaciones de la industria de alimentación y bebidas españolas se han elevado en un 7,6% en el primer semestre del año, tras la ligera ralentización sufrida en 2013, según se extrae del ‘Informe de Exportaciones de la Industria de la Alimentación y Bebidas 2013: Análisis a medio y largo plazo’ presentado por la Federación Española de Industrias de la Alimentación y Bebidas (FIAB).
«La evolución de este semestre nos indica que, después de haber sufrido una ralentización en su crecimiento el pasado año, las exportaciones de la industria alimentaria están volviendo a crecer en una tasa interanual del 7,6%, siguiendo la tendencia de los años anteriores a 2013″, ha explicado el director del departamento de Asuntos Económicos e Internacionalización de FIAB, Jaime Palafox.
En concreto, las cifras de los primeros meses del año superan con creces los resultados obtenidos no sólo por el sector agroalimentario, en concreto el de las frutas y hortalizas frescas, sino también los del conjunto de la economía.
Respecto a los productos más exportados en este periodo, los del porcino se mantienen al frente del ranking, con unas ventas superiores a los 3.000 millones de euros, seguidos por el vino, con 2.583 millones de euros, un 2% menos, y el aceite de oliva, que sube un 69% hasta los 2.085 millones de euros, gracias a su espectacular cosecha.
La Unión Europea sigue siendo el principal mercado para los productos alimentarios españoles, con una cuota del 73,8% del total exportado, siendo Francia, Portugal, Italia, Alemania y Reino Unido los cinco primeros destinos. «España todavía tiene potencial de crecimiento exportador agroalimentario en la Unión Europea», ha recalcado.
Respecto a los terceros países donde España exporta, Estados Unidos se mantiene al frente del ranking con 981 millones de euros y un crecimiento sostenido en los últimos años, y destaca el buen comportamiento de China y Hong Kong, con 557 millones de euros y un crecimiento del 20% en los últimos cinco años, mientras que Japón cierra el podio, gracias a un fuerte incremento del 13% en el último año, hasta los 413 millones de euros.
España, además, se sitúa como el sexto país en el ranking europeo, que está liderado por Alemania, Países Bajos, Francia, Italia y Bélgica. «Se están recogiendo los frutos del esfuerzo enorme de las empresas. La exportación es un maratón y no una carrera de 100 metros», ha señalado el director del departamento de Asuntos Económicos e Internacionalización de la federación.
De esta forma, el sector alimentario prevé que el crecimiento de exportaciones supere el 35% de la producción total en 2020, ya que la parte de la producción total que exporta estos productos no ha dejado de crecer en los últimos años, pasando de representar poco más del 15% en 1998 a más del 25% en 2013.
Por otro lado, el director del departamento de Asuntos Económicos e Internacionalización ha reconocido que el veto ruso de este verano «ha afectado» a las exportaciones alimentarias, aunque «no hay cuantificación concreta» de las pérdidas por el momento.
Retos del sector. Por otro lado, Jaime Palafox ha subrayado que uno de los retos a los que se enfrenta la industria alimentarias es que se «vende demasiado barato», ya que considera que hay que vender en relación a la gran calidad de los productos españoles.
El directivo de FIAB ha destacado la importancia de que las empresas abran oficinas comerciales en otros países y ha indicado que sobre todo son las empresas medianas y dedicadas a la carne, vino y aceite las que están apostando por el exterior y se están instalando en Estados Unidos y China, principalmente.
Palafox también ha recalcado la importancia de que el sector apueste por dar «valor añadido», por lo que ha abogado porque las empresas «ganen en dimensión» y no se venda a granel. «La incorporación de más valor añadido y empresas más competitivas duplicarán las exportaciones del sector agroalimentario en 10 años», ha subrayado.