Redacción. El nuevo crédito concedido en operaciones de financiación al consumo cerrará el año 2014 con un crecimiento situado cerca del 5%, hasta alcanzar los 32.100 millones de euros, lo que supone un cambio de tendencia después del fuerte descenso registrado en el período 2010-2013, según un estudio de la consultora DBK.
Este giro en la evolución se produce en un contexto de mejora del consumo final de los hogares, en el que la demanda de financiación para la adquisición de automóviles mostrará el mayor dinamismo, favorecida por el crecimiento previsto de la venta de turismos.
En 2013, la inversión nueva en financiación al consumo se situó en 30.713 millones de euros, lo que supuso un retroceso del 2,8% respecto al año anterior, moderándose la tendencia a la baja del período 2010-2012, en el cual se registró un descenso medio anual superior al 15%.
Por tipo de entidad, el crédito concedido por las entidades especializadas en crédito al consumo -establecimientos financieros de crédito (EFC) y bancos especializados- experimentó un crecimiento del 1,9% en 2013, hasta alcanzar la cifra de 18.859 millones de euros. Su penetración en el mercado ha pasado del 52% en 2010 al 61% en 2013.
En cuanto a las entidades de depósito no especializadas en crédito al consumo, su inversión nueva se redujo un 9,4% en dicho ejercicio, situándose en 11.854 millones de euros, lo que representó el 39% del total.
El grado de concentración del negocio de crédito al consumo continúa acentuándose, como consecuencia del proceso de reestructuración del sector financiero. En 2013, las cinco primeras entidades reunieron de forma conjunta el 47% de la inversión nueva total, mientras que las diez primeras concentraron el 65%.
En junio de 2014 operaban en España un total de 282 entidades de crédito, lo que supuso 9 menos que en diciembre de 2013 y 31 menos que en diciembre de 2012. En el período comprendido entre diciembre de 2012 y junio de 2014 el número de entidades de depósito se redujo en 23, hasta situarse en 235, mientras que el número de establecimientos financieros de crédito pasó de 55 a 47.
Según DBK, la aplicación de herramientas de control del riesgo continúa siendo un pilar fundamental de las estrategias de las entidades de crédito, junto con la fidelización de la cartera de clientes, la mejora de la gestión de impagados y la racionalización de los recursos para ajustar los costes.
Por su parte, los créditos preconcedidos, la discriminación de los tipos de interés y las comisiones en función de la vinculación y la rentabilidad global del cliente, y la incorporación de seguros en los contratos están adquiriendo una creciente importancia en el sector.