Redacción. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha recibido este miércoles, 30 de julio, en la puerta del Palacio de La Moncloa al presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas. Éste ha subido las escaleras de la entrada y ha sido arriba donde ambos dirigentes se han saludado. De fondo, las banderas española, catalana y europea.
Tras estrecharse la mano y posar para los gráficos, ambos han entrado en La Moncloa para dar inicio a la reunión a puerta cerrada, antes de lo cual han permitido a los medios captar algunas imágenes mientras comentaban sus planes vacacionales para las próximas semanas.
La reunión entre ambos ha comenzado sobre las 11.10 horas y ha terminado poco antes de las 13.25 horas. El jefe del Ejecutivo ha planteado a Mas la «conveniencia de colaborar de la manera más intensa en lo que es la principal prioridad de los ciudadanos de Cataluña y del resto de España, que es consolidar y acelerar la recuperación económica que permita una creación intensa de puestos de trabajo».
Economía. En ese punto, Rajoy ha aprovechado para hacer un repaso ante Mas de las últimas cifras de la evolución de la economía española y ha advertido al dirigente autonómico sobre los «riesgos que la inestabilidad política» podría suponer, a su juicio, al «incipiente proceso de recuperación, que está resultando particularmente intenso en Cataluña», de modo que se ha mostrado convencido de la necesidad de «preservar el clima de confianza logrado con tanto esfuerzo por parte de los ciudadanos».
Tras expresar su «compromiso con el bienestar y el futuro» de los catalanes y su «reconocimiento personal y político a la importancia de Cataluña por su enorme aportación», tanto cultural e histórica como económica y social, al conjunto de España, Rajoy ha trasladado a Mas su compromiso con el «mantenimiento y correcto funcionamiento de los servicios públicos esenciales«.
Sobre esta cuestión, ha recordado las medidas que el Gobierno ha facilitado para garantizar la financiación de comunidades autónomas y ayuntamientos y el pago a sus proveedores y ha adelantado al dirigente autonómico las «líneas generales del nuevo paquete de apoyo económico a las comunidades autónomas» que está ultimando el Ejecutivo y que contempla «la reestructuración de la deuda del FLA con el consiguiente alivio de su carga de intereses y la reestructuración de las devoluciones negativas de las comunidades autónomas».
Además, ha mostrado su «convencimiento» de que la economía de Cataluña resultará «muy beneficiada con las próximas reformas», entre ellas «la reforma fiscal, los nuevos planes de crecimiento y competitividad y las medidas de activación para el empleo, que ayer acordó con los interlocutores sociales».
Todo ello añadido al paquete de propuestas sobre mejoras en la administración pública que, según ha recordado Rajoy en la reunión, el Ejecutivo ya ha enviado al Parlamento, así como otras que remitirá en el próximo periodo de sesiones, por lo que ha animado a Mas para que los representantes de CiU en el Congreso «participen activamente en ese debate».
Infraestructuras. Por su parte, el presidente de la Generalitat a la reunión con un documento con 23 asuntos relacionados con la política social y económica, los cuales Rajoy se ha comprometido a estudiar «con ánimo constructivo».
Entre ellos, las obras públicas, y Mas ha recordado que «hay temas en infraestructuras que no requieren de dinero público» para que puedan ejecutarse, entre los que ha citado un tren lanzadera que enlazaría el centro de Barcelona con la terminal T1 del Aeropuerto y en cuya construcción «hay empresas privadas interesadas».
Mas ha dicho que Barcelona cuenta con el aeropuerto que «más crece en todo el sur de Europa» y también a nivel estatal, por lo que debe tener unas conexiones a la altura. En la actualidad, la T1 está unida con el centro de Barcelona mediante una red de autobuses y está previsto que llegue la Línea 9 del Metro.
Consulta soberanista. Por otro lado, el presidente de la Generalitat ha reiterado que su hoja de ruta pasa por celebrar una consulta soberanista «legal» el próximo 9 de noviembre y ha explicado que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, le ha dicho que su propuesta es ilegal, por lo que no ha habido ningún acuerdo.
«No hay ninguna propuesta alternativa más allá de decir que la consulta no se puede hacer porque es ilegal», ha dicho Mas sobre Rajoy, a la par que ha puesto en valor que haya un «clima de diálogo abierto» con el Estado y ha destacado que su reunión con Rajoy no es «el final de nada».
Así, el político catalán ha asegurado que convocará esa cita a las urnas tanto si hay acuerdo con el Estado como si no lo hay y ha reconocido que, en este último caso, el Gobierno lo recurriría ante el Tribunal Constitucional. «Si nos obstaculizan el 9 de noviembre desde el punto de vista legal entraremos en otra fase, pero ahora no la voy a comentar», ha señalado.