Redacción. El presidente y fundador de la ONG Mensajeros de la Paz, el padre Ángel García, viaja este 22 de julio a Amán (Jordania) para encontrarse con los 65 palestino-españoles evacuados de Gaza y acogidos por Mensajeros de la Paz, e intentará llegar a la franja para entregar un cargamento de ayuda humanitaria y preparar, si es posible, nuevas evacuaciones a España u otros países, especialmente de niños heridos en los últimos ataques y que precisen atención sanitaria.
No es la primera vez que el sacerdote español visita Gaza para ayudar a la población. En noviembre de 2009 consiguió que las fronteras de Gaza se abrieran para nueve menores enfermos que fueron trasladados a España para recibir tratamiento sanitario. La propia Reina Sofía le apoyó en esta iniciativa.
Entre los 65 evacuados acogidos por la organización desde la madrugada del pasado domingo, 20 de julio, hay 42 menores. Se trata de un grupo de varias familias, todas con pasaporte español, formado principalmente por madres e hijos, casi todos menores de 12 años. El más pequeño tiene 11 meses.
Estas personas han abandonado sus viviendas en la franja de Gaza ante los ataques que se han producido desde que el Ejército israelí lanzara la operación Margen Protector. Su evacuación ha sido posible gracias a la intervención del cónsul general de España en Jerusalén, Juan José Escobar, y de las gestiones de la Embajada Española en Amán.
Desde su llegada a la capital hachemita, el grupo está siendo atendido por Mensajeros de la Paz Jordania que les proporciona alojamiento, manutención y ayuda material y psicológica hasta que la situación permita el retorno seguro a sus hogares.
La intervención de Mensajeros de la Paz en la atención a estos refugiados palestino-españoles se ha realizado atendiendo la petición de la Agencia de Naciones Unidas para los refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA), que en las últimas horas ha solicitado también a la ONG española ayuda para la alimentación de los más de 50.000 refugiados en escuelas de Gaza, ya que apenas disponen de alimentos para 35.000 personas.