Carlos Fernández. El surrealismo es una deformación estética de la realidad que se ha llevado a la pintura, cine, literatura…y es un movimiento que ha ido perdiendo popularidad en los últimos años en el medio audiovisual. La última gran obra que vimos de este género fue en 2012 con ‘Holy motors’ de Leos Carax y antes de esta película encontramos ejemplos, cada vez más lejanos, como ‘Cómo ser John Malkovich’ de Spike Jonze o “Abre los ojos” de Alejandro Amenábar pero son las únicas recientes en destacar como grandes películas surrealistas, ¿Qué ha sido del impulso de contar una historia de manera distinta o simplemente atrevida? Impulsos que tuvieron directores como Roman Polanski (Repulsión), Ingmar Bergman (La hora del lobo), David Lynch (Twin peaks) y la joya de la corona, Luis Buñuel (Un perro andaluz).
En el canal BOING, tan oculto para muchos, se esconde una programación, disfrazada de infantil, para adultos con ganas de divertirse con un humor bastante macabro o para aquellos que simplemente amen la psicodelia. Series como ‘Hora de aventuras’ se centra en las aventuras surrealistas vividas por dos amigos y sus hermanos adoptivos, historias tan macabras y absurdas como divertidas y originales, sin duda la gran serie por excelencia de este canal. Otras series como ‘Historias corrientes’ o ‘El asombroso mundo de Gumball’ siguen la misma temática de este canal con el mismo talento, surrealismo y animación en estado puro e incluso ¿arte?, los creadores de estas series, apadrinadas por Cartoon Network y emitidas en Boing han logrado crear una estética ochentera con guiones venenosos y repartos corales que podrían encasillarse como los representantes del surrealismo en el medio audiovisual hoy día o por lo menos, lo más cercano que tenemos a nuestro alcance.