Redacción. Cruz Roja Española cumple esta semana 150 años y para celebrarlo, ha convocado a sus miles de voluntarios de todo el país a una serie de actos de conmemoración que se celebrarán este viernes 4 de julio en Madrid, entre exposiciones y muestras de su trabajo dentro y fuera de las fronteras.
La Reina Doña Letizia presidirá el acto central, que tendrá lugar en el Palacio Municipal de Congresos de Madrid y que será retransmitido en directo para todos los ciudadanos mediante una pantalla gigante instalada en la Plaza Mayor, otro de los puntos neurálgicos de las conmemoraciones.
Entre otros eventos, el viernes se organizarán en Madrid exposiciones y exhibiciones de distintos Equipos de Respuesta a Emergencias (ERIE) y Unidades de Respuesta a Emergencias (ERU), un puzle gigante en la Puerta del Sol y actividades en la Plaza de Vázquez de Mella, según ha informado la institución humanitaria.
El punto central de la jornada estará en el Parque de El Retiro, adonde llegarán todos los miles de voluntarios de toda España que está previsto se desplacen a Madrid para la conmemoración. Allí se celebrará un acto de clausura del aniversario a ritmo musical con batucada entre Templete de música y Plaza de Galicia.
Cruz Roja Española se organizó en 1864 bajo los auspicios de la Orden Hospitalaria de San Juan de Jerusalén y fue declarada «Sociedad de Utilidad Pública». Desde entonces, los distintos gobiernos de la nación, han estado representados de una forma u otra en el seno de la Institución.
En una primera época, su actuación estuvo centrada en intervenciones humanitarias en caso de conflicto armado. En 1870 prestó ayuda en la guerra franco/prusiana –el primer envío de ayuda humanitaria que realizó la Cruz Roja Española– y en 1872 actuó por vez primera de forma directa en la tercera guerra carlista.
A raíz de los conflictos bélicos en África en 1918, se produce una fuerte expansión de sus centros sanitarios, llegando a sumar cerca de 36 hospitales. Durante la Guerra Civil de 1936 a 1939 realizó un a importante actividad y, finalizada ésta, se encargó de la repatriación de los españoles que se encontraban en la URSS.
Esta experiencia se empleó para intervenir en desastres ocurridos en territorio nacional, asistiendo a víctimas de incendios, inundaciones y accidentes de todo tipo, hasta que en los años 70 completó la red de Puestos de Primeros Auxilios en las carreteras españolas, e inició sus tareas de socorro en el mar y en aguas interiores.
Más adelante, en los ochenta, su actividad creció exponencialmente t a partir de 1985 inició una reorganización de la institución, abriéndola al voluntariado, que en los noventa culminó con una adaptación a los nuevos retos de la sociedad: se consolidó su trabajo con los colectivos vulnerables y se ampliaron los programas internacionales.
