C.N. El próximo sábado 31 de mayo se celebra el Día Mundial Sin Tabaco, fecha que la Organización Mundial de la Salud (OMS) estableció como una jornada global para la concienciación en torno a esta problemática. El objetivo de la campaña de 2014 es que los gobiernos aumenten los impuestos sobre el tabaco hasta niveles que reduzcan su consumo.
El consumo de tabaco es responsable de la muerte de uno de cada diez adultos en el mundo, siendo además su consumo y la exposición al humo que desprende el causante de numerosas enfermedades pulmonares y también cardiovasculares. Según los expertos, el tabaquismo es la principal epidemia prevenible a la que se enfrenta la sociedad, de ahí la importancia de impulsar actividades de concienciación frente al consumo de tabaco que ayuden a disminuir el número de personas fumadoras o de aquellas que empiezan a hacerlo, haciendo especial hincapié en las generaciones más jóvenes.
El 83 por ciento de los neumólogos que han participado en el estudio ‘Prevalencia de tabaquismo y actitudes ante el tabaco de los socios de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ), realizada por el área de tabaquismo de esta organización, considera el tabaquismo como una enfermedad crónica, por lo que destacan la necesidad de realizar acciones de prevención y concienciación que mejoren la calidad de vida de los pacientes.
«Los médicos y otros profesionales de la salud constituyen importantes fuentes de influencia que pueden ayudar a lograr cambios positivos de los niveles de tabaquismo en la población. Los resultados obtenidos muestran que sólo el 3 por ciento de los neumólogos de Separ entrevistados fuma en la actualidad, registrando una media de 6 cigarrillos diarios. El 67 por ciento de los expertos incluidos no ha fumado nunca», según ha afirmado el coordinador del Área de Tabaquismo de Separ, Segismundo Solano. Asimismo, los resultados obtenidos han mostrado que una amplia mayoría de profesionales (82%) considera que la intervención más eficaz en el abordaje del tabaquismo es el uso de fármacos combinado con apoyo psicológico.
En relación a los hábitos de consumo entre los más jóvenes, la Encuesta Estatal sobre Uso de Drogas en Estudiantes de Enseñanzas Secundarias (ESTUDES 2012-2013), refleja que, en 2013, el 43,8% de los escolares ha fumado tabaco alguna vez en la vida, el 35,3% en el último año y el 12,5% lo fuma a diario. Pese a ello, en los últimos ocho años el consumo de tabaco por parte de los estudiantes de entre 14 y 18 años se ha reducido en un 50%. En 2004, el 21,5% de este sector de la población fumaba a diario, frente a un 12,3% en 2010 y un 12,5% en 2013.
De otro lado, los datos apuntan que sigue aumentando la percepción del riesgo del consumo de tabaco pues, según esta encuesta, más del 90% de los escolares consideran que fumar a diario es peligroso para la salud. En cambio, se observa un ligero repunte en el consumo medio de cigarrillos, aunque las cifras siguen siendo claramente inferiores a las de 2004. Entre los fumadores diarios, las mujeres fuman menor número de cigarrillos que los hombres.
El especialista de la Unidad de Deshabituación Tabáquica de Hospital Quirón Murcia, el doctor Juan Carlos Rueda, ha señalado que el 70 por ciento de los fumadores abandona el tabaquismo a los tres meses de someterse a un tratamiento de deshabituación. En este sentido, ha explicado que «ayuda a sus pacientes a dejar de fumar mediante cambios en todos los aspectos de su vida, haciendo hincapié en la importancia de incorporar el deporte a la rutina del exfumador como una de las piezas claves en la recuperación».
El doctor ha recordado los beneficios directos que se generan cuando una persona abandona los cigarros. «A los pocos días se vuelve a disfrutar de olores que habíamos olvidado por el efecto del tabaco, se mejora la salud respiratoria y tanto el pelo como la ropa dejan de oler a cigarrillo».
La mayoría de acciones que se ponen en marcha para contribuir a la deshabituación tabáquica se centran, sobre todo, en la educación y la promoción de estilos de vida saludables. Por ello, para la conmemoración de este día se celebran en todas las ciudades españolas actividades como sesiones informativas sobre los efectos negativos del tabaquismo en el organismo, entrega de material explicativo, los recursos disponibles que existen para dejar de fumar, el intercambio simbólico de frutas o flores por cigarrillos o la realización gratuita de cooximetrías y espirometrías a todos los interesados, entre otras.
La cooximetría es una exploración que permite conocer la cantidad de monóxido de carbono que una persona tiene en el aire que espira. Esta prueba permite valorar la intensidad del consumo y el grado de dependencia a la nicotina de una persona. Se trata de un test sencillo y de resultado inmediato. Por su parte, la espirometría es un estudio rápido en el cual se utiliza un dispositivo manual denominado «espirómetro» para medir la cantidad de aire que pueden retener los pulmones de una persona (volumen de aire) y la velocidad de las inhalaciones y las exhalaciones durante la respiración (velocidad del flujo de aire).
Como una propuesta original cabe señalar, por ejemplo, una iniciativa puesta en marcha en Teruel, desarrollada por el Ayuntamiento y la Asociación Española contra el Cáncer. Degustar un delicioso bizcocho y otro que sabe a humo o ver el contraste entre el olor de la menta o el tomillo y el de las colillas de cigarrillos son algunas de las actividades con las que han querido sensibilizar a los fumadores para que dejen este hábito y prevenir el consumo entre los jóvenes.
«Cambio cigarro por fruta» es el lema de la campaña puesta en marcha por la Delegación de Igualdad, Salud y Políticas Sociales en Almería y el Complejo Hospitalario Torrecárdenas con motivo del Día Mundial Sin Tabaco.
Y en Oviedo, bajo el lema «Respira vida» el Ayuntamiento ha programado por diferentes escenarios de la ciudad actividades lúdico-educativas con talleres y espectáculos teatrales. Además, el consistorio ha puesto en marcha un taller hasta el día 9 de junio para que quien lo desee pueda dejar esta adicción.
En definitiva, todas estas actuaciones tienen como objetivo transmitir un claro mensaje: que las personas que no fuman sigan sin hacerlo, y los fumadores recuerden todos los beneficios que supone tener una vida sin tabaco.