Redacción. Un total de 2.426 personas en riesgo de exclusión social en Castilla y León se insertó el pasado año en el mercado laboral de mano de 4.049 contratos conseguidos por Cáritas, Cruz Roja, Secretariado Gitano, FSC Inserta y Fundación Luis Vives en el marco del Programa Operativo de Lucha contra la Discriminación.
Las organizaciones, a excepción de la Luis Vives, han presentado el lunes, 19 de mayo, los datos correspondientes a la gestión realizada en 2013, que cerró con 8.908 personas atendidas (3.885 hombres y 5.023 mujeres) y 4.049 contratos conseguidos (1.310 hombres y 2.729 mujeres; de ellos, 1.312 eran jóvenes menores de 30 años).
Las personas insertadas (939 hombres y 1.487 mujeres) alcanzan las 2.426, cifra ostensiblemente inferior a la de contratos pero que, según la coordinadora de Cáritas en Castilla y León María Jesús Díez Guerrero, refleja la realidad de un mercado laboral del que entran y salen las personas varias veces a lo largo de un año.
Este hecho es, para la directora territorial de FSC Inserta Begoña Grijalvo, positivo porque significa que los colectivos con los que trabajan «funcionan perfectamente» y repiten, a lo que ha añadido que los 392 contratos indefinidos logrados (9,68 por ciento) constituyen un dato «pobre» que, de nuevo, refleja la situación del mercado laboral «para todo el mundo».
La cifra de alumnos formados asciende a 2.970 (1.263 hombres y 1.707 mujeres) y la de cursos a 509, hasta sumar 74.431 horas de formación centrada en campos como la limpieza, nuevas tecnologías, vinculadas a la hostelería, envasador, empleo doméstico o teleoperador, entre otros. Además, según han precisado, la no consecución de un contrato laboral no supone el fin del trabajo con esos beneficiarios.
Respecto a las empresas en las que recalan los beneficiarios del Programa, las cuatro entidades no han dado una cifra de las colaboradoras pero Díez Guerrero sí ha reconocido que, debido al contacto personal y directo, es más fácil llegar a las pequeñas, aunque con las grandes se trabaja a través de sus líneas de responsabilidad social.
Uno de los principales obstáculos a derribar aún en este proceso es el de los prejuicios que vinculan la contratación de personas con discapacidad, inmigrantes, gitanos y en riesgo de exclusión, con diversos problemas. En relación a este punto, la coordinadora de Cruz Roja Española en Castilla y León Eva Fernández se ha referido a la «seguridad» que aporta tanto al empresario como a los propios participantes el seguimiento que se realiza tras la inserción.
El desarrollo del Programa se lleva a cabo a través de itinerarios personalizados de formación y búsqueda de empleo que han propiciado en el último año la creación, además, de 18 empresas.
Tras una primera fase de acogida de participantes, se procede a la orientación individual profesionalizada a la que sigue una tercera fase de formación y una la última de intermediación laboral, la más difícil, con la vista puesta en la inclusión laboral y social de estos colectivos.
El desarrollo de los itinerarios, que se complementan con medidas centradas en otros campos como el acceso a la vivienda o la escolarización de menores, entre otros, han contado con la participación de 404 voluntarios que han realizado labores de acompañamiento, acogida o prospección laboral, y de 109 personas contratadas como mediadores y orientadores que «hacen una labor de contención social muy importante» en tiempos de crisis.
Por otro lado, Fernandez ha matizado que “el Programa es un motor para el empleo” y también ha recalcado que la «rentabilidad» económica de las inserciones laborales logradas ha sumado la social: las familias de los nuevos trabajadores se benefician también de esa situación y de la autonomía, en distintos ámbitos, que acompaña la consecución de un empleo.
Este Programa, uno de los 22 vinculados a los Fondos Estructurales del periodo 2007-2013 y que busca combatir la discriminación de personas en riesgo de exclusión y atraerlos al mercado laboral a fin de que su inserción sea una opción «real y efectiva», es gestionado por estas organizaciones desde el año 2000.
Asimismo, la directora territorial de la Fundación Secretariado Gitano en Castilla y León Mar Fresno ha precisado que, en la actualidad, se negocian los Fondos Estructurales para el periodo 2014-2020, aunque existe la posibilidad de fijar una prórroga de dos años para los actuales, vigentes hasta el pasado año.