Redacción. La Policía Nacional ha detenido a R.D.G., de 23 años de edad, y a una mujer, A.G.G., de 22, como presuntos autores de un total de 25 robos con fuerza cometidos en distintos domicilios de Sevilla capital empleando una novedosa técnica delictiva para acceder al interior de los inmuebles conocida como ‘impresioning’, abrir cerraduras sin rastros evidentes. Habrían participado en al menos 25 robos repartidos por toda la capital sevillana cometidos en tan sólo un mes.
Estos especialistas cerrajeros fueron sorprendidos por los agentes cuando pretendían entrar en el interior de un piso llevando consigo herramientas y joyas procedentes de otros robos. La investigación se inició a través de las denuncias interpuestas por las víctimas de distintos robos en domicilios cometidos sin que aparentemente se supiera la forma de acceso al interior de los inmuebles.
Durante las primeras diligencias, los investigadores se centraron en averiguar el ‘modus operandi’, ya que desvalijaban viviendas sin dejar rastro evidente de forzamiento de cerraduras en puertas o ventanas. Los agentes comprobaron que entraban en las viviendas mediante el método delictivo conocido como impresioning: colocar varillas de aluminio deformable dentro de la cerradura para que queden impresas las marcas de la llave del propietario y, posteriormente, con una llave maestra, poder abrir la puerta sin oposición alguna y sin dejar rastro.
Dos agentes de paisano detectaron la presencia en uno de los puntos previamente determinados de dos personas, un hombre y una mujer, que intentaban acceder a los portales de distintos bloques sin éxito. Cuando finalmente accedieron, mientras la mujer permanecía fuera vigilando, el hombre entró. Los agentes intervinieron y, tras retener a la joven en el portal, le detuvieron a él cuando manipulaba la cerradura de uno de los pisos.
Les fueron intervenidas varias herramientas, ganzúas y varillas de aluminio deformable con los que acceder a las viviendas para cometer los robos; así como, en el interior del vehículo en el que se desplazaban numerosas piezas de joyería sustraídas en domicilios de robos anteriores.
Las gestiones realizadas con el GPS encontrado en el vehículo utilizado por los autores de los robos reveló las rutas seguidas y que se correspondían con las fechas y lugares de los robos cometidos en la ciudad y de los que se había tenido constancia.