Redacción. Los ciudadanos de Madrid tienen a su disposición una manera alternativa de tener coche en la ciudad, el «coche de barrio», una propuesta pionera en el mundo que verá la luz por primera vez en Madrid de la mano de Bluemove, empresa de carsharing.
Bluemove Community, que es como se llama el proyecto, se basa en la adquisición por parte de un «vecino conector» de este tipo de vehículos a través de un contrato de renting de entre 50 y 150 euros al mes.
Las condiciones de financiación serán muy beneficiosas siempre que el «conector» comparta un porcentaje del tiempo de uso del coche y promueva su uso entre sus amigos y vecinos.
La naturaleza compartida del «coche de barrio» minimiza los costes de adquisición de un vehículo en propiedad. El ahorro de este servicio supondría pasar de los 15.000 euros que cuesta un coche nuevo, a un rango entre 50 y 150 euros al mes.